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Leishmaniosis, algo de qué preocuparse.

INTRODUCCIÓN

La leishmaniosis canina es una enfermedad vectorial causada por un parásito, el cual es transmitido por la picadura de un mosquito, que se conoce con el nombre de flebótomo. El perro se considera el principal hospedador. Además de su importancia en la salud de nuestras mascotas, esta enfermedad también destaca en el ámbito de la salud pública, pues los seres humanos también pueden contraerla.


DATOS SOBRE LOS FLEBOTOMOS

Los flebotomos tienen una actividad nocturna y la mayoría de las especies ingieren sangre de sus hospedadores inmediatamente después de la puesta del sol. La actividad de estos mosquitos se concentra especialmente por la noche y con temperaturas de 18-22ºC. Durante el día, estos insectos se esconden en lugares oscuros y húmedos como son las grietas y agujeros en muros de piedra, así como establos de animales o sótanos.

SIGNOS CLÍNICOS

Esta enfermedad puede dar la cara relativamente pronto en el tiempo tras la picadura, pero también puede tardar meses e incluso años en manifestarse. Los síntomas varían en función de la respuesta inmune del animal, su historial clínico y otros factores desconocidos. Están descritas dos formas de presentación, no excluyentes entre ellas: - Leishmaniosis cutánea - Leishmaniosis visceral





LEISHMANIOSIS CUTÁNEA

La más frecuente, destaca porque las principales manifestaciones de la enfermedad se observan a nivel de piel.


Esta se caracteriza por:

  • Inicialmente lesiones en piel con aspecto seco que evolucionan a heridas ulceradas

  • Pérdida de brillo y densidad del pelo

  • Pérdida de pelo, especialmente alrededor de los ojos, de la trufa, extremos de las orejas y las zonas óseas prominentes (especialmente extremidades)

  • Excesivo crecimiento de uñas

  • Aumento de tamaño de ganglios linfáticos locales o generalizado

  • Retraso en la cicatrización de heridas









LEISHMANIOSIS VISCERAL

Es menos frecuente, de evolución más lenta y produce graves lesiones en órganos vitales como son el hígado, riñón, bazo y sistema inmunitario, entre otros.

En estos casos puede observarse:



  • Pérdida de apetito

  • Hemorragia nasal

  • Pérdida de peso, debilidad progresiva y apatía

  • Diarreas crónicas

  • Orina y bebe con mayor frecuencia



OTRAS MANIFESTACIONES

Otros signos que se asocian con la leishmaniosis son:

  • Cojeras

  • Lesiones oculares





PREVENCIÓN

Ante este enemigo, la mejor opción es la prevención de la picadura junto con la inmunización de nuestra mascota.


Entre los métodos de prevención se encuentran:


  • Empleo de collares repelentes

  • Aplicación de pipetas

  • Vacunación frente leishmania, una única dosis protege durante 1 año

  • Evitar paseos durante las horas de actividad de los mosquitos

  • Protección de los lugares de descanso de nuestras mascotas con mosquiteras e insecticidas



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