Las diarreas neonatales se definen como síndrome multifactorial, principal causa de mortalidad, en el que intervienen factores dependientes del hospedador, del ambiente, del manejo y microbiológicos.
Para su manifestación se deben dar una serie de factores que dependen, además del agente responsable de la diarrea (virus, bacterias o protozoos), del propio animal, de su inmunidad, la carga de animales en un mismo local y la concentración de los partos en los sistemas de cría.
Su origen puede ser alimentario o infeccioso:
Causas alimentarias se producen con frecuencia en aquellos animales que sufren indigestiones o son alimentados con lactorreemplazantes de mala calidad, mal preparados o en condiciones higiénicas separadas.
Causas infecciosas destacan:
Virus: rotavirus, coronavirus y varios enterovirus.
Bacterias: Escherichia coli, Salmonella, Clostridium sp
Parásitos: protozoos, coccidios y Cryptosporidium
SINTOMATOLOGÍA
Suciedad en cuartos posteriores, cola y patas
Aumento de la frecuencia de defecación
Consistencia de las heces alterada
Heces acuosas y delgadas
Signos de deshidratación
Debilidad
Extremidades frías
Dificultad para incorporarse o mantenerse en pie
TRATAMIENTO
El tratamiento de esta patología consiste en la reposición de los fluidos y electrolitos perdidos como consecuencia de la diarrea. Los objetivos de la terapia con fluidos se basa en al rehidratación y el reemplazo de electrolitos y de nutrientes.
Otros agentes terapéuticos empleados comprenden:
Antibióticos
Protectores y absorbentes gastrointestinales
Antiinflamatorios
Probióticos
Antitoxinas
Etc
PREVENCIÓN Y CONTROL
El primer paso para prevenir la aparición de diarreas neonatales, consiste en la identificación de los principales factores de riesgo.
Conseguir una prevención total de la enfermedad no es posible ni lógico, por lo que el principal objetivo es disminuir la incidencia de esta patología, para reducir los gastos veterinarios y así tener mayor rentabilidad económica.
Existen tres principios básicos para el control de las diarreas neonatales:
Reducir la exposición de los neonatos a los agentes infecciosos: mediante correctas prácticas de higiene y manejo
Proporcionar resistencia con una buena alimentación y encalostramiento: Asegurar un correcto encalostramiento de los neonatos al nacer, al menos deben ingerir un 5% de su peso de calostro en las primeras 6 horas de vida.
Resistencia específica mediante la vacunación de las madres: Establecimiento de un programa vacunal de las madres, de forma que al vacunar las hembras, la inmunidad frente estas principales enfermedades se transferirá al ternero por medio del calostro.
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